Saturday, December 30, 2006

DEFINICION DE MATRIMONIO




DEFINICION DE MATRIMONIO - Por designio del Creador, y por ser el mismo propósito de la creación, el matrimonio es una comunidad de amor y vida, una alianza permanente e irrevocable, una unidad indisoluble, una “reciproca pertenencia” establecida entre UN sólo HOMBRE y una sola MUJER, con pleno consentimiento libre y voluntario de mutua aceptación, para celebrar su común-unión íntima, entrañable y sagrada de AMOR CONYUGAL en forma exclusiva y con fidelidad absoluta, para su propio bien y perfeccionamiento mutuo, la procreación y la educación de los hijos, y por ende el beneficio de la totalidad de la humanidad, y del Cielo y la Tierra.
-----------------


DECLARACIÓN INTERNACIONAL PARA LA CONFIRMACIÓN DEL MATRIMONIO

Considerando que la Declaración Universal de los Derechos Humanos, el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y otros instrumentos internacionales legales fundamentales reconocen a la familia como el elemento natural y fundamental de la sociedad,

Considerando que la gran mayoría de las leyes de las naciones también reconocen a la familia como el elemento fundamental de la sociedad,

Considerando la verdad universal antropológica y sociológica de que la institución del matrimonio es el fundamento de la familia, y el principal elemento que la mantiene unida; y también

Considerando que la Declaración Universal de los Derechos Humanos, el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y otros instrumentos internacionales legales fundamentales reconocen el derecho al matrimonio,

Considerando que la definición universal del matrimonio consiste únicamente en la unión de un hombre y una mujer, y esta definición y práctica está arraigada en la naturaleza,

Nosotros - los líderes políticos, de negocios, de iglesias y de la comunidad, alrededor del mundo - proclamamos esta

DECLARACIÓN INTERNACIONAL PARA LA CONFIRMACIÓN DEL MATRIMONIO:

  1. La familia siempre ha sido el componente básico de la sociedad.
  2. Para todas las sociedades existentes, el matrimonio, como el vínculo sexual y doméstico permanente entre un hombre y una mujer, es el fundamento universal de la vida familiar.
  3. Los intentos para manipular las normas internacionales o para crear “nuevas” normas para destruir la definición del matrimonio, constituyen una violación del derecho natural, el derecho de las naciones y los derechos internos de los países.
  4. Los esfuerzos de algunos miembros de la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas para hacer que la “orientación sexual” sea un derecho humano, van en contra del derecho natural, el derecho de las naciones y los derechos internos de los países.
  5. Hacer que la orientación sexual sea un derecho humano es el primer paso para cambiar la definición del matrimonio y para normalizar otras formas de apareamiento sexual que ofenden a las normas sociales.
  6. La Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas debería poner su atención en las violaciones de los derechos humanos que han sido difundidas alrededor del mundo (incluyendo la violación al derecho a la vida y a la libertad de religión) y no a la creación y promoción de “derechos” falsos basados en tan débiles fundamentos como el de la “orientación sexual.”

------------

Wednesday, November 29, 2006

Un delirio llamado “matrimonio homosexual”

El “Matrimonio” por definición siempre será “heterosexual”
Los que están a favor de equiparar las uniones sexuales de dos hombres o de dos mujeres con el MATRIMONIO, quieren hacernos creer que todo es una cuestión de discriminación hacia los homosexuales, de ampliación de derechos, de estar a la altura de los tiempos que corren, de ser más tolerantes y otras posiciones similares, que giran supuestamente alrededor de tres reclamos básicos: el principio de libertad de la persona en su conducta y desarrollo; el principio de igualdad ante la ley; y el principio de no discriminación.

En el fondo, si lo analizamos con detenimiento vemos que ninguno de esos principios está siendo violado, es más bien una cortina de humo o una forma de desviar la atención a lo que realmente si se pretende; ya que no se lesiona el principio de libertad, pues mientras no se atente contra el orden público, el Estado no debe inmiscuye en la vida privada de nadie. Ni se daña el principio de igualdad ante la ley, pues el homosexual, como cualquier otro ciudadano, puede contraer matrimonio con una persona del sexo opuesto. Tampoco se va contra el principio de no discriminación, pues negar la consideración de matrimonio a las uniones homosexuales no es una discriminación, sino un acto de justicia: se trata de forma diferente a lo que es diferente.

Es importante exponer con claridad y enfatizar que lo que se busca en este caso no es el reconocimiento de un derecho personal, sino el reconocimiento de que una unión sexual de dos personas del mismo sexo es exactamente lo mismo que la unión heterosexual del matrimonio. Y aquí, por el principio de identidad, es donde falla completamente el razonamiento. De la misma forma que no podemos admitir que un pene es igual a una vagina o en la biología molecular que un varón (con cromosomas XY) es igual a una mujer (con cromosomas XX), tampoco en jurisprudencia podemos admitir la confusión legal de que la unión de “un hombre con un hombre” o la de “una mujer con una mujer” es igual a la unión de un “hombre con una mujer”.

El matrimonio no es una mera unión afectiva, ni una simple cohabitación sexual, sino una alianza establecida entre un hombre y una mujer, un compromiso específicamente centrado en esa diferenciación complementaria, que naturalmente esta abierto a la posibilidad de ser principio común de generación de nuevas vidas. Por el contrario, en una unión entre personas del mismo sexo, no puede existir la complementariedad, ni es posible la conyugalidad, ni puede darse una real paternidad o maternidad. No hay discriminación, porque, se ponga el nombre que se ponga, una cosa es una cosa y otra cosa es otra cosa. Hasta el propio Karl Marx lo escribió en 1832: "Quien contrae matrimonio no crea, no inventa el matrimonio, del mismo modo que el nadador no inventa la naturaleza o las leyes del agua o de la gravedad".

Esta pretensión de equiparar las uniones del mismo sexo con el matrimonio plantea en su esencia que no hay diferencia entre el varón y la mujer, con lo cual ya está separándose y contraviniendo leyes naturales impuestas a todos los seres vivos, ninguno de los cuales jamás las ha ignorado, exceptuando a los humanos. El matrimonio "no" se basa en una noción subjetiva, personal o relativa de "mi orientación sexual" o "mi comprensión del amor" o "este amor es muy especial para mí", u otras expresiones similares que se dan en este tiempo en un intento por justificar una relación sexual entre personas del mismo sexo. Llamar matrimonio a una unión homosexual es una mentira de la que no podemos ser cómplices. Para mí es algo tan absurdo como si tuviésemos que aceptar, por que lo impuso un “parlamento” por votación, que nuestro planeta Tierra ahora es cuadrado, o que debemos alimentarnos introduciendo comida por los oídos, o que es igual un pene a una vagina.

En el proyecto de construir una civilización del amor, las personas homosexuales serán respetadas y acogidas con amor, pues como todos, están dotadas de la dignidad inalienable que corresponde a cada ser humano, pero eso no significa que a dos personas del mismo sexo les asiste algún derecho a contraer matrimonio entre ellas. El Estado no puede reconocer este derecho inexistente, a no ser actuando de un modo arbitrario que excede sus capacidades, que contradice pactos y declaraciones internacionales, y que dañará, sin duda, muy seriamente el bien común.

----------------------
Un delirio llamado “matrimonio homosexual”
La palabra “matrimonio” tiene mucha fuerza y tradición, incluso hoy a pesar de una crisis evidenciada por el aumento de los divorcios y las uniones de hecho, el matrimonio sigue siendo una institución digna, respetable y con mucho atractivo.

El matrimonio es el destino natural de cada ser humano, pues por designio del Creador (o de la naturaleza para los no creyentes), el verdadero matrimonio es una alianza permanente establecida entre un hombre y una mujer, con pleno consentimiento libre y voluntario de mutua aceptación, para celebrar su común-unión íntima y sagrada de AMOR CONYUGAL en forma exclusiva y con fidelidad absoluta, para su propio bien y perfeccionamiento mutuo, la procreación y la educación de los hijos, y por ende el beneficio de todos.

Es lógico por tanto que exitan muchos esfuerzos por imitar o aparentar ese reconocimiento de ‘matrimonio’, pero sin cumplir con todas las condiciones requeridas, como ocurre con las parejas de hecho, y ahora con la pretensión de legalizar los así llamados “matrimonios homosexuales”. Para lograr esta pretensión se presentan basicamente tres argumentos: el principio de igualdad ante la ley, el principio de no discriminación y el principio de libertad de cada persona en su conducta y desarrollo.

En el fondo, si lo analizamos ninguno de esos principios está realmente en juego; pues no se daña el principio de igualdad ante la ley, todos son exactamente iguales a los demás, ante lo que el matrimonio representa, ya que no se le impide a ningún hombre contraer matrimonio con una mujer, o una mujer con un hombre. Tampoco se va contra el principio de no discriminación, porque nadie les trata con desigualdad respecto a los demás; y no se viola el principio de libertad, porque mientras no se atente contra el orden público el Estado no se inmiscuye en la vida privada.

Claro y simple, lo que se pretende con esos razonamientos es el reconocimiento de que una unión homosexual es exactamente lo mismo que el matrimonio. Esto es lo que debe ser expuesto con claridad y sin confusión. El principio de identidad nos dice que lo que es igual, es igual; y lo que es distinto, es distinto; lo que es distinto no puede ser igual; lo que es igual, no puede ser distinto. El matrimonio no es una mera unión afectiva, ni una simple cohabitación sexual, sino una alianza establecida entre un hombre y una mujer, un compromiso específicamente centrado en esa diferenciación complementaria y la posibilidad de ser principio común de generación. A esta realidad se llama matrimonio. Y por eso A es distinto que B.

Además, el matrimonio y la familia son la base de la sociedad, claves en la organización de la convivencia y el parentesco. Por ello, merece una consideración pública y jurídica por parte del Estado al ser parte esencial del bien común.

Como dice Juan Ignacio Bañares: “En una unión entre personas del mismo sexo no puede existir la complementariedad (justamente porque se quieren como mujer-mujer o como varón-varón), ni es posible la conyugalidad (porque no pueden darse y recibirse en plenitud de su masculinidad y feminidad), ni puede darse una real paternidad o maternidad. Por eso no hay discriminación: porque, se ponga el nombre que se ponga, una cosa es una cosa y otra cosa es otra cosa. No es una cuestión confesional: es un tema de razón y de bien común: "Quien contrae matrimonio no crea, no inventa el matrimonio, del mismo modo que el nadador no inventa la naturaleza o las leyes del agua o de la gravedad". La cita no es de un texto o autor católico, ni siquiera cristiano; en pocas cosas estoy de acuerdo con él, pero describe la diferencia entre el nombre -el logotipo- y el contenido: lo escribió Karl Marx en 1832.”
-----------------------------

Cita de Manuel Fraga Iribarne:

"La juventud está cansada de los que les dicen que se disuelven sus familias, que ya no pueden contar con sus padres, y que va a haber matrimonios de personas del mismo sexo, que yo no tengo nada en contra de ellos: Si nacen así pues qué se le va a hacer pero que no digan encima que se ponen orgullosos de funcionar al revés."

Nota: Manifestado en Teo, En una cena en el municipio coruñés de Teo con miembros de Nuevas Generaciones del Partido a raíz de las reformas del matrimonio y del divorcio que estaban anunciadas en el Estado español, ambas ya en vigor.

Fuente: "Fraga reprocha a los homosexuales que estén «orgullosos de funcionar al revés»" de 20 Minutos (18 de enero, 2005).
http://www.20minutos.es/noticia/110/0/fraga/critica/homosexuales/

Clip de audio en la web de la Cadena SER
http://www.cadenaser.com/actualidad/audios/fraga-gays-estan-orgullosos-funcionar/sernot/20050116csrcsr_1/Aes/